Sólo la soledad...

Su sola existencia tal vez suponía una oportunidad más, hay días en que la soledad abriga al alma... como una fría sabana negandonos el deseo de ir a dormir. Son más de las 12 y el temor a dormir es extraño, sobre todo cuando se sabe que al día siguiente a las 5 de la mañana hay que estar despierto.

Quizá la existencia de la soledad es la que me da la oportunidad de hacerme sentir más fuerte, de animarme a escribir como hace días no lo hago... de reflexionar, y de estar acá.

Una vez me dijeron que la soledad es un infierno en vida, o algo así; para alguien como yo creo que si debe de serlo, detesto estar sola, sentir vacío en el aire e inseguridad antes de dormir.
Para otros en cambio, la soledad no es un medio ni oportunidad de nada; sólo es un fin en si mismo. Se busca y anhela como por instinto, se lucha por ella y se defiende.

De esa bendita palabra nacen tantas canciones y desgarradores poemas, hasta yo he recurrido al dichoso tema. Es que la verdad es en la mayoría de casos un efecto del desamor, o algo así... en mi caso particular pues no le veo un sentido así, nada más está... coexiste... Y habitamos la noche en una especie de simbiosis.

Ya abrí el youtube, y mi bosquejo de canciones es digamos que bastante amplio en cuanto a opciones... es interesante cuando nos tomamos la molestia de analizar una palabra.

"Soledad bendita que ahora me resguardas,
ya no sé si pedirte que me abraces...
o decirte que te vayas"

Aquí os dejo algo del famoso filósofo y erudito Ricardo Arjona... fuera de broma está
interesante.

Ello y su Sueño...

Tengo ganas de escribir, sólo que no se de qué... esa sensación es una orden del Ello, casi un instinto como el que apareció ahora en mi examén de psicología. Mientras lo terminaba sólo pensaba en como tu mente puede ser estudiada; las ideas vuelan, los sueños también y recuerdos forman parte de momentos mágicos.

¡Qué bueno recurrir a la sensación de recordar los buenos sueños!... ¿A poco no les ha pasado que después de dormir, nos gusta pasar recordando lo que hemos sentido? Gracias a la vida que nos ha dado esos momentos para poder construir paraísos que en el día se nos han sido negados.

Ahora ya me dió sueño, Morfeo me reclama mientras escribo. Es curioso que cuando se hable del sueño de sueño, y mientras en el twitter me declaro soñolienta pienso en que aún no es tiempo para dormir.

Si escribir o dormir son los deseos en mi Ello más fuertes, lo siento y no sé si Maslow este orgulloso por mí; sólo quiero obedecer a mis instintos por una noche... y quizá así dejar de sentirme humana, por desobedecer al razocinio cuando trato de sincronizar el ser con el universo.

Como Agua para Chocolate...

Hace un par de semanas leí por fin este libro... en realidad la película la vi como a inicios de este año hoy que lo recuerdo. Desde ese día hacia acá, por fin he conocido la película que quizá nunca me cansare de ver.
Leer el libro fue una experiencia más llena de magia aun, conocí a una Tita tras la pantalla de mi notebook y me enterneció muchas más veces que la película. Me sentí medio triste porque a poco no pasa que cuando ves primero la película se te estropea la lectura; así que no pude ver otra Tita que no fuera con el rostro de Lumi Cavazos y Marco Leonardi como el Pedro Musquis.

De cualquier forma pues debo confesar que soy una adicta a la comida, y sobre todo esa película parece un retrato de una familia como la nuestra; cálida, tradicional, guiada por el sabor de la cocina, y refugiada en creencias mágicas que ni la modernidad ha podido borrar de nuestras casas.

Mi familia es un vivo ejemplo, no puede existir una reunión sin la comida de la abuela. Ahora mi mamá ha aprendido lo que mi abuela alguna vez tuvo que aprender, ¿Qué si yo seguiré el mismo camino? pues lo dudo, pero seria triste no volver a sentir el sabor de la comida de la casa que te vio crecer